El Parlamento gallego aprobó ayer la revisión del Plan Forestal, a lo que el PP califica como “un instrumento básico de planificación forestal que busca la eficiencia a través de la ordenación y la gestión sostenible de los espacios y recursos #forestal”. A pesar de esta defensa no faltaron de nuevo las voces en contra que siguieron sucediéndose toda la jornada.
Elena Candia defendió que el nuevo Plan Forestal es “un documento flexible y vivo, que nace con el compromiso serio de su puesta en marcha y aplicación”. Así, recordó que en su elaboración participaron 26 entidades e incorpora casi el 90 por ciento de las directrices propuestas, así como el 75 por ciento del dictamen de la Comisión de Estudio sobre la política forestal y los incendios forestales celebrada la pasada legislatura.
PSOE
El portavoz de Política Forestal del Grupo Socialista, Martín Seco, le reclamó al gobierno gallego que retire el Plan Forestal para presentar un nuevo documento “serio y riguroso”. Respondió así a la propuesta de transacción única presentada por el PP en el Pleno del Parlamento para suspender las nuevas plantaciones de eucaliptos donde no se hubieran plantado hasta el momento, que calificó de “ocurrencia” y “ chalaneo”.
Seco reclamó la retirada del documento para volver al consenso del año 2018, “que preveía una planificación forestal imprescindible para dos tercios del territorio y que fue incumplido por el gobierno gallego”. Advirtió que “nuestro rural no está para ocurrencias”, como calificó a la propuesta de suspensión “en cinco minutos, sin explicación técnica ni encaje en el desenrollo del plan”.
Los socialistas gallegos presentaron una serie de propuestas de Resolución, además de la contraproposta de transacción conjunta para la retirada del plan, para garantizar que cumplan con la legalidad, adaptando el texto al nuevo marco jurídico vigente en Galicia en virtud de la nueva Ley de Ordenación del Territorio de Galicia.
Martín Seco reclamó además un nuevo procedimiento de evaluación ambiental estratégica, adaptar el período de vigencia, ejecución y programación derivado de los retrasos reiterados en la tramitación del Plan, adaptar la senda presupuestaria a los tiempos de la Consellería de Medio Rural y que “opten o bien por la inclusión del rol de la Agencia Gallega de la Industria Forestal o directamente su supresión”.
BNG
El BNG censuró a la Xunta su anuncio de una moratoria a las nuevas plantaciones de eucaliptos que finalmente no incorporó al Plan Forestal de Galicia ni transaccionou con el resto de fuerzas políticas durante la tramitación y votación #final del texto.
Durante lo debate previo a la votación, la portavoz nacionalista de Montes, María Albert, ya había advertido de la “poca fiabilidad de este movimiento” que viene a demostrar que al PP “ dalle igual lo que ponga el documento”. “En el papel coge todo, hasta que presenten como propuesta estrella una moratoria, que no prohibición, que ya está en vigor a día de hoy y que llevan saltando por el arco del triunfo durante 12 años incumpliéndola sistemáticamente”, recalcó.
En este sentido, explicó que en 2016 la propia Junta reconocía una superficie total de eucalipto, entre superficies puras y superficies mixtas, de 310.000 hectáreas, cifra que dos años más tarde ya se elevaba a 422.000 hectáreas. “Si el plan forestal de 1992 preveía 245.000 hectáreas para 2032 y en 2016 ya estaban hablando de 310.000, porque no pararon esta expansión? Tenían los argumentos, tenían la norma y tenían la capacidad política y de gobierno para hacerlo y no lo hicieron”, reprobó para a continuación concluir que “sin embargo, ahora nos tenemos que creer que para que el BNG y el PSOE voten a favor de este plan, de repente van a hacer lo que no hicieron durante 12 años en el gobierno”.
