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ES-Lugo

Agromuralla acusa al Concello de Lugo de engañar a los ganaderos “para ganar elecciones”

Por 12 Febreiro, 2021Febreiro 13th, 2021Sin comentarios

Explotación ganadera en Muxa

La asociación de ganaderos y ganaderas Agromuralla acusa al Ayuntamiento de Lugo de “no preocuparle lo más mínimo” el mantenimiento de la actividad agroganadera en el municipio, después de “denegar a muchos ganaderos” que tienen sus explotaciones en el término municipal su derecho a una bonificación del 50% en el pago de las licencias e impuestos de obras de mejora de sus establos.

Agromuralla explica que están llegando denegadas a una veintena de ganaderos las solicitudes de devolución de estas cantidades, cobradas “indebidamente” por el Ayuntamiento en los años 2017, 2018 y 2019, a pesar de que “justo antes de las últimas elecciones municipales los concejales responsables de Medio Rural y de Economía y Hacienda, ambos del PSOE, se reunieron hasta en dos ocasiones con los afectados y, tras reconocer el error en la redacción de las ordenanzas reguladoras y en la aplicación de las bonificaciones, se comprometieron a resolver el problema, algo que ahora no cumplen”.

Se trata de cantidades que van desde los 2.000 a los 7.000 euros y que “ponen en riesgo la viabilidad de las granjas”, denuncia Agromuralla, por lo que exigen a la alcaldesa, Lara Méndez, “que tome cartas en el asunto si no quiere ser cómplice del engaño”. “Si la alcaldesa no resuelve este asunto, que se arrastra ya desde hace tres años, estará mostrando que no le importa el rural”, asegura la asociación de ganaderos, que pide responsabilidades “por la incompetencia y por mentir y engañar a los ganaderos para ganar las elecciones”.

REBAJAS EN LAS LICENCIAS DE OBRA

El Ayuntamiento de Lugo promovió en el año 2016 una rebaja del 50% en las licencias de obra para construcción o ampliación de explotaciones en las 54 parroquias rurales del término municipal,  con el objetivo de favorecer el desarrollo del sector agroganadero en el municipio pero “esta intención fue solo teórica y propagandística”, según Agromuralla, porque “a la hora de la verdad los teóricos beneficiarios, los ganaderos, no se podían acoger a las bonificaciones por cómo estaba redactada la norma”.

Las condiciones eran “tan surrealistas”, dicen, que a un ganadero de nueva incorporación a la actividad le pedían que demostrara que estaba dado de alta en la actividad desde hacía dos años, al igual que se pedía que quien hiciera la obra fuera el dueño del terreno, lo que dejaba fuera a los jóvenes que querían mejorar las explotaciones de sus padres.

Esta redacción incongruente de la norma, corregida a partir de 2020, provocó que durante los tres años anteriores la mayoría de los ganaderos que hicieron obras de mejora en sus establos o instalaciones anexas no pudieron hacer efectivo su derecho a la bonificación. Para “tratar de acallar el enfado de los perjudicados”, recuerda Agromuralla, en dos reuniones celebradas con los afectados a las puertas de las últimas elecciones municipales de 2019, “los concejales del PSOE se comprometieron a la devolución de este dinero cobrado indebidamente a los ganaderos, algo que no se está cumpliendo”.