Si en los últimos días trascendían las posturas contrarias al traslado por parte de los diputados nacionales por Lugo -que incluso solicitaron la comparecencia en el Congreso del director general de la Policía Nacional-, de los propios sindicatos policiales o de la asociación ‘Sí, Hay Salida’ de atención a mujeres maltratadas, que mostraba su preocupación por las consecuencias que el cambio puede tener sobre la atención a las víctimas de violencia de género, ahora son los representantes vecinales los que manifiestan su “rotundo rechazo” a esta decisión.
Representantes de la Federación de Asociaciones de Vecinos ‘ Lucus Augusti’ se reunieron este lunes con representantes del Sindicato Unificado de Policía (SUP) y de la UFP (Unión Federal de Policía) para mostrarles su apoyo en contra del cierre de la sala del 091 en la comisaría de Lugo, porque supondrá “la pérdida irremediable de inmediatez y eficacia” en la respuesta policial.
Para los representantes vecinales, en los casos de emergencia la atención “debe prestarla un agente que conozca adecuadamente la ubicación geográfica desde donde recibe la llamada y esta circunstancia se pierde con la centralización del servicio”. Si el objetivo es ampliar la presencia de efectivos policiales en las calles, dicen, instan al Gobierno a “cubrir las vacantes existentes” y proponen que sean los agentes más veteranos, “que ya no realicen servicios en la calle”, los que se encarguen de atender las llamadas del 091.
COMPARECENCIA EN El SENADO
También el senador lucense José Manuel Barreiro ha mostrado su rechazo al cierre de la sala del 091 en Lugo, al tiempo que reclamó al Gobierno central “más consideración” con Galicia en general y con Lugo, en particular.
En su opinión “es intolerable” que Lugo pierda “un servicio fundamental” para la seguridad. “No podemos admitir eso, y al igual que los compañeros del Congreso pidieron la comparecencia de los responsables de Interior, nosotros haremos el mismo en el Senado y exigiremos que Lugo mantenga un servicio que es clave para la seguridad y tranquilidad de nuestros vecinos”, adelantó.
El GOBIERNO SE MANTIENE FIRME
Frente a las manifestaciones contrarias al cierre de la sala en la comisaría lucense, el Gobierno se mantiene firme en su decisión y sigue defendiendo las “ventajas” de este cambio.
El delegado del Gobierno, Javier Losada, insiste en que “la eficacia policial está garantizada y la atención a los ciudadanos no se resentirá por la centralización de la sala del 091”. Ejemplos de que el servicio no se resiente están, dijo, en el traslado que ya se hizo el año pasado con las salas de Ferrol y Santiago o, en el año 2017, cuando fueron suprimidas las salas en las comisarías de Monforte y Viveiro. “La seguridad no se resentirá y Lugo no perderá funcionarios de policía, ya que aumentará el número de agentes en la calle y en labores de investigación”, explicó.
Javier Losada recordó además que el traslado del servicio del 091 es una nueva fase “de un plan puesto en marcha en su día por el Gobierno de Rajoy”. La centralización del servicio tendría como fin “la optimización de recursos y las ventajas que nos ofrecen las nuevas tecnologías, como ocurre con otros teléfonos de servicios de emergencias que, como el 112, atienden perfectamente a los ciudadanos funcionando de manera centralizada”, finalizó Losada.
