Entrevista. “El teatro es una ventana abierta a un mundo mejor”

Cómo nace Metátese Teatro?

En una reunión informal de amigos, Xosé Manuel Pérez Paredes propone preparar un espectáculo teatral para el mes de agosto de 1993 para conmemorar el ‘Día da dona verde’ en Vilar de Donas. Se trataba de una fiesta de reivindicación de la naturaleza y de defensa y lucha contra los incendios. Estaba organizada por la Asociación A Capela, de esta aldea. A todos nos pareció una idea excepcional y, el día 21 de diciembre del año 1992, tuvimos el primer ensayo en el local social de la aldea de Vilar de Donas. Ese fue el germen del grupo.

Esperabais en aquel momento toda la trayectoria que vendría después?

No. En aquel rato solo queríamos preparar esa obra de teatro para la celebración de la fiesta. Lo que ocurrió es que disfrutamos tanto de la preparación, puesta en escena y presentación de la obra que decidimos seguir disfrutando del teatro y con el teatro, y con esa filosofía llegamos hasta hoy.

Cuantas personas integran a día de hoy Metátase teatro, y cuantas personas pudieron pasar por el grupo a lo largo de sus casi tres décadas de trayectoria?

Metátese Teatro está integrado en la actualidad por 24 actrices y actores, con unas edades comprendidas entre los 15 y los 64 años. A lo largo de la trayectoria vital del grupo pasaron más de doscientos integrantes.

Cuál es la clave del éxito de la agrupación?

La práctica de un teatro social, inclusivo y abierto a toda la comunidad. Todas aquellas personas que son amantes del teatro tienen un lugar en Metátese Teatro. Intentamos poner en práctica un teatro que integre a  seres humanos de todas las edades, de todas las condiciones sociales y culturales. Nunca entramos en la dinámica de la selección, sino que fomentamos la interrelación, el intercambio, el diálogo entre los integrantes y también con la sociedad y otras agrupaciones.

Metátese Teatro destaca además por una fuerte presencia internacional, acercando incluso la práctica teatral a países  desfavorecidos… que destacarías de estas experiencias?

Las experiencias más intensas, enriquecedoras y gratificantes fueron precisamente las que vivimos en estos países desfavorecidos. El teatro siempre fue la herramienta que vertebró nuestro trabajo con una finalidad social, integradora  y de concienciación. En Ecuador colaboramos, por ejemplo, con la Fundación Kawsay en comunidades de los indígenas saraguros en la educación ambiental y la nutricional. Creamos un espectáculo donde se defendía el valor de los productos que ellos cultivaban, frente a la entrada de la denominada por ellos “comida chatarra”. Con el MST (Movimiento de los sem Terra) preparamos una en un campamento en Apiaí y otra en Itapeva con el objetivo de sensibilizar sobre la violencia y los maltratos. Esa misma pieza la compartimos también en la favela A Rocinha, en Rio de Janeiro.

En Mano de León, en una aldea perdida en la selva guatemalteca a la que se accede después de caminar una hora, llevamos a escena con los chicos de la aldea una pieza de teatro sobre el valor de las tradiciones y la cultura propia. En Cuzco (Perú) cooperamos con el orfanato Amantaní y con la organización Aldea Yanapay para acercar el teatro a un sector de la población que no tiene acceso a la cultura. En El Salvador participamos en la grabación de una radionovela con Radio Tehuacán que pretendía la educación ambiental. Llevamos también a cabo proyectos en países como Cuba, Argentina, Japón, Francia, Italia, Grecia, Rusia, Nepal…

Cómo definirías el tipo de teatro que hacéis?

Pretendemos que sea un teatro participativo, abierto, integrador, que genere autoestima grupal e individual, basado en los modelos de Jerzy Grotowski, Augusto Boal -con quien coincidimos en Río de Janeiro en el 2008-, Eugenio Barba… Esto lo llevamos a cabo en colaboración con asociaciones de los países que mencionamos antes, y aquí en Galicia con proyectos de recuperación etnográfica como Son D’aldea o Son do Mar.

Sois un grupo aficionado, como se compagina el teatro con las ocupaciones profesionales de cada uno?

Los horarios de ensayo respetan la jornada laboral de los integrantes y, como las funciones suelen ser en el fin de semana, no hay ningún tipo de problema. Los viajes de intercambio a nivel estatal o al extranjero intentamos que sean en períodos vacacionales, para que pueda viajar la mayoría de integrantes del grupo.

De dónde viene la afición de los vecinos de Palas de Rei por el teatro?

Es una disciplina artística que presenta una amplia tradición en este ayuntamiento, pues ya desde hace muchos años había grupos de teatro en las aldeas. En Albá, por ejemplo, existía un grupo, que aún recuerdan mujeres que participan en el Son d’aldea, que dirigía el cura y que celebraba sus ensayos en la casa parroquial. También lleva muchos años funcionando el grupo de Amas de Casa de San Tirso de Palas de Rei, y a mayores surgió también Alentía Teatro.

Con qué apoyos contáis?

El Ayuntamiento de Palas de Rei nos cedió varios locales en la Casa de Cultura para guardar el material de iluminación, son y atrezo, nos posibilitan que ensayemos en el salón de actos y apoya también la Muestra de Teatro que organizamos a finales del verano. A través de la Diputación de Lugo participamos hasta el año 2019 en el programa Buxiganga y, el año pasado, en el ciclo ‘Táboas cheas de emoción’. Formamos también parte de FETEAGAL , la Federación Teatral Aficionada de Galicia, y a nivel estatal de ESCENAMATEUR, a través de las que participamos en cursos y realizamos intercambios a nivel gallego, estatal e internacional.

Cómo está afectando la pandemia al grupo?

Se redujeron de forma considerable las funciones y también nos dificultó los ensayos, pues nos obligan a articular otras formas de preparar los espectáculos. Debido al número que somos, tenemos que ensayar en pequeños grupos o vía telemática, y eso es muy complicado.

Estáis retomando las actuaciones, con la puesta en escena de ‘A Merliña’, que se puede encontrar en esta obra?

Una fábula adaptada a espectáculo teatral que se vertebra alrededor del juego y la comicidad como herramientas de crecimiento. Una ‘merliña’, una pequeña, simpática y gracioso personaje, símbolo de esperanza dentro de un mundo gris transita en la búsqueda de una respuesta a una pregunta universal: ‘Quién soy?. Así comienza desde su nido un recorrido vital encima de las tablas del escenario en el que tiene que enfrentarse a diferentes personajes embusteros, que son la personificación de la avaricia, de la gula, de la prepotencia, del despotismo y de la ruindad.

Cómo se presentan los próximos meses?

Intensos y con mucha actividad teatral, pues tenemos proyectadas varias actuaciones precisamente con ese espectáculo, que estrenamos el domingo 7 de marzo en la Casa de Cultura de Palas.

Metátese Teatro está detrás de numerosos festivales de teatro, tenéis algo proyectado en este sentido?

Estamos inmersos, junto con la Asociación Son d’aldea, en la organización de su décimo aniversario, también en la grabación audiovisual de escenas teatrales creadas por el Obradoiro Municipal de Teatro de Palas de Rei y en la preparación de la XXII Muestra Internacional de Palas de Rei, que será a finales de agosto. Además queremos, en cuanto la situación sanitaria lo permita, retomar los intercambios con grupos de otros países y también a nivel estatal.