Ecologistas en Acción se entrevistó con las fuerzas políticas del Ayuntamiento de Corgo que comparten la preocupación por las graves consecuencias ambientales de la macro industria cárnica y les solicitó que adopten todas las medidas posibles para impedir que la megagranja avícola se instale en su ayuntamiento.
La organización ecologista, integrante de la “Coordinadora Estatal Stop Ganadería Industrial”, señala que España se convirtió en el refugio de las megagranjas ante una industria que huye de la exigente regulación ambiental de la mayoría de los países europeos y busca legislaciones losas como la española y gobiernos permisivos como el gallego para evitar asumir los costes ambientales que causan sus explotaciones cárnicas.
Denuncian que no hay comarca que teniendo implantadas megagranjas tanto aviar como de porcino o vacuno que no tenga graves consecuencias ambientales de contaminación por nitratos de sus aguas. Está comprobado que la macro industria cárnica está lejos de gestionar adecuadamente los residuos que generan sus explotaciones. Las propias parcelas donde pretenden instalar el macro proyecto tienen una cara lacustre propia de un humedal al estar atravesada por varios riachuelos al otro lado del río Maceda. Esta situación agravaría el proceso de transferencia de los nitratos a las escorrentías y manantiales de la zona.
Alertan que al riesgo de envenenamiento de acuíferos debido a los vertidos de purines además hay que añadirle la fuerte pestilencia que provocan las granjas de aves que suele afectar en un amplio radio alrededor de las instalaciones.
