Espinosa critica el abandono de la salud mental en Galicia y denuncia el ocultismo en las listas de espera
La viceportavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Elena Espinosa, cargó este martes contra la Xunta por su gestión de las listas de espera y lo que calificó como “falta absoluta de compromiso con la salud mental”. Durante un debate parlamentario, Espinosa criticó que el Gobierno gallego considere urgente atender una conducta suicida en un plazo de hasta siete días. “¿De verdad esa es la gran apuesta por la salud mental en Galicia? ¿Siete días para una urgencia vital? Es una vergüenza”, sentenció.
La diputada recordó que Galicia es la segunda comunidad del Estado con más muertes por suicidio y advirtió que los profesionales de la salud mental insisten en que la intervención debe ser inmediata. “Si se detecta y atiende rápido, se tiene más éxito. Pero el PP llama a eso atender en siete días”, ironizó.
También acusó al Ejecutivo de Rueda de “maquillar la realidad” de las listas de espera con un sistema “opaco y manipulado”, que oculta las listas no estructurales. “Mientras el PP no reconozca la realidad, no podrá dar respuesta a las necesidades asistenciales de la ciudadanía”, advirtió.
Espinosa recordó que el presidente de la Xunta prometió mejoras respecto al año 2019, pero los datos de 2024 reflejan todo lo contrario: “Hay más personas esperando y los tiempos de espera son más largos”. Asimismo, denunció que los hospitales gallegos trabajan con plantillas insuficientes, una situación que también fue advertida recientemente por Amnistía Internacional, que alertó de una caída del 5% en la inversión sanitaria.
La diputada socialista reclamó a la Xunta sensatez y responsabilidad: “El envejecimiento de la población no puede ser una coartada para no hacer nada. Hay más pacientes crónicos, sí, pero también más medios tecnológicos y un personal sanitario que da lo mejor de sí”.
Concluyó denunciando que el verdadero problema es el de la accesibilidad al sistema sanitario, y que mientras el PP “siga viviendo en una realidad paralela, las listas de espera seguirán disparadas y la salud mental seguirá abandonada”.