La CIG reclama un SMI de 1.374,74 € en 2026 y la jornada laboral de 35 horas

La Confederación Intersindical Galega (CIG) reclamó este lunes situar el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) para el año 2026 en 1.374,74 euros mensuales, lo que supondría un total de 19.246,80 euros brutos anuales, con el objetivo de alcanzar el 60 % del salario medio en el Estado español, tal y como recomienda la Carta Social Europea.
Las propuestas fueron presentadas en rueda de prensa por el secretario general de la CIG, Paulo Carril, y el secretario confederal de Negociación Colectiva, Francisco González Sío, que detallaron las líneas principales de la acción sindical de la central nacionalista de cara a la negociación colectiva de 2026, tras conocerse los datos de la Agencia Tributaria sobre salarios y pensiones.
Carril explicó que, según estos datos, el salario medio en el Estado español durante 2024 fue de 32.078 euros anuales, por lo que el SMI debería situarse, como mínimo, en el 60 % de esa cantidad para garantizar condiciones de vida dignas. El secretario general recordó que la CIG defiende desde 2019 que el SMI tenga carácter no compensable ni absorbible y reclamó la eliminación del IPREM como referencia para el acceso a prestaciones públicas.
El dirigente sindical advirtió de que en Galicia, de más de 1,1 millones de personas asalariadas registradas en 2024, el 34,1 % perciben ingresos inferiores al SMI, una cifra que ha aumentado de forma notable desde 2009. Unos datos que, según la CIG, evidencian la precarización del mercado laboral tras las distintas reformas laborales.
Carril denunció también que solo el 39,1 % de la población asalariada gallega supera los 20.000 euros de ingresos anuales y que alrededor del 20 % de la población activa vive atrapada en situaciones de pobreza salarial. En este contexto, defendió que la subida del SMI contribuiría a reducir la brecha salarial de género y a combatir la precariedad laboral entre la juventud.
En el ámbito de la negociación colectiva, Francisco González Sío detalló que la CIG defenderá para 2026 una subida salarial del 5 %, la incorporación de cláusulas de revisión ligadas al IPC, un salario mínimo de convenio equivalente al SMI reclamado y medidas de transparencia para combatir la desigualdad salarial entre hombres y mujeres.
En cuanto a la jornada laboral, la central apuesta por la implantación de la jornada semanal de 35 horas, como paso previo a las 32 horas, y por limitar la jornada máxima anual a 210 días. También reclamó un mayor control sobre las mutuas, oponiéndose a que gestionen bajas por contingencias comunes, y medidas para frenar los abusos en la contratación fija-discontinua y a tiempo parcial.
La CIG defendió la negociación colectiva, la movilización y la huelga como herramientas fundamentales para avanzar en la mejora de las condiciones de vida de la clase trabajadora y garantizar empleo estable y salarios dignos.