Se superan las 88.000 hectáreas quemadas en Ourense según datos de la Xunta
La provincia de Ourense empieza a respirar un poco de calma tras más de una semana de tensión provocada por los incendios forestales. La situación de ayer fue más tranquila, aunque continúan activos cinco grandes fuegos, con especial atención al que amenaza la zona de Trevinca y que ya ha arrasado unas 3.000 hectáreas.
La magnitud de esta ola de incendios es tal que, en apenas dos semanas, Ourense superó los tres mayores incendios documentados en la historia reciente de Galicia, superando al del Courel en 2022, que calcinó 11.500 hectáreas.
El de mayor extensión sigue siendo el de Larouco, declarado el miércoles 13 de agosto, que ya ha alcanzado alrededor de 30.000 hectáreas, convirtiéndose en el tercero más grande de la historia de España desde que existen registros. Este fuego afecta también a Quiroga, O Barco de Valdeorras, O Bolo, Carballeda de Valdeorras, A Rúa, Petín, Rubiá, A Veiga y Vilamartín de Valdeorras.
A continuación se sitúa el incendio que une Chandrexa de Queixa (Requeixo y Parafita) con Vilariño de Conso (Mormentelos), que, tras iniciarse entre los días 8 y 14 de agosto, formó un único gran incendio de aproximadamente 19.000 hectáreas. El fuego se extiende también a Manzaneda, Montederramo, A Pobra de Trives, O Bolo y Laza, y continúa activo.
También permanece activo el incendio que comenzó en Oímbra (A Granxa) el 12 de agosto y que se unió con el de Xinzo de Limia, en Gudín, sumando unas 17.000 hectáreas afectadas, lo que lo convierte en el tercero mayor de la historia de Galicia.
En A Mezquita, el fuego en la parroquia de Esculqueira afecta alrededor de 10.000 hectáreas, extendiéndose a los municipios de Gudiña y Viana do Bolo y llegando incluso a la provincia de Zamora, mientras que el quinto foco se sitúa en Carballeda de Valdeorras, en la parroquia de Casaio, procedente de Castilla y León, que ya ha quemado unas 3.000 hectáreas en la zona de Trevinca.
Además de estos fuegos activos, están estabilizados: Carballeda de Avia y Beade (4.000 hectáreas), Vilardevós – Moialde (600 hectáreas), Vilardevós – Vilar de Cervos (900 hectáreas), Vilardevós – Fumaces y A Trepa (100 hectáreas), Riós – Trasestrada (20 hectáreas), Montederramo – Paredes (120 hectáreas) y Oia – Mougás (60 hectáreas, Situación 2 desactivada). A esto se suman dos incendios ya extinguidos: Rante, en San Cibrao das Viñas (40 hectáreas) y Seixalbo (107,79 hectáreas).
De este modo, la provincia vive una de las peores oleadas incendiarias de su historia, dejando a su paso montes y localidades completamente arrasados. Desde la Xunta llaman a la calma y aseguran que la situación evoluciona favorablemente.