La Guardia Civil detuvo, en el marco de la operación ‘Black Line’, a cuatro jóvenes e investiga a un quinto, con edades comprendidas entre los 18 y los 25 años, como supuestos autores de una docena de robos con fuerza en el interior de viviendas de una parroquia de Carballedo.
Los agentes tienen conocimiento de los hechos el pasado día 1 de febrero, después de recibir el aviso del propietario de una de las viviendas afectadas. Ya en el lugar comprobaron que todas las viviendas de ese núcleo rural habían sido forzadas. En la zona encontraron también un remolque de grandes dimensiones abandonado al quedar encajado en una cuneta, y comprobaron que había sido robado en Celanova, cerca precisamente de la aldea de la que proceden los presuntos autores de los robos.
Su modus operandi consistía en trasladarse a zonas rurales aisladas, donde seleccionaban las casas que podían ser de su interés para cometer los robos. Se trasladaban luego con dos turismos, uno de ellos con remolque que desenganchaban en las cercanías ocultándolo en zonas discretas, para acto seguido hacer batidas buscando sus objetivos, y una vez se aseguraban de no ser detectados, enganchaban nuevamente el remolque y accedían al interior de las viviendas substraendo multitud de efectos.
Las personas detenidas y la investigada fueron puestas la disposición del Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción de Chantada. La investigación continúa abierta y la Guardia Civil no descarta nuevas detenciones.
