La Guardia Civil, en el marco de la operación thorir contra el tráfico de estupefacientes, desarticuló una red de tráfico de drogas, integrada en su mayoría por ciudadanos residentes en A Mariña lucense.
La operación se inició tras tener conocimiento que servicios de prostitución en la zona podrían estar vinculados al consumo de estupefacientes y al tráfico ilícito de estas drogas.
Las investigaciones dieron comienzo al detectarse movimientos de personas vinculadas a la distribución de drogas durante el confinamiento de la covid-19, en los que se detectó que se saltaban las órdenes de confinamiento sin razones ni causas justificativas, intensificando su actividad ilícita en el momento de la desescalada, hasta tal punto que se suministraban de provincias como Guipuzcoa, de donde procedía la partida más cuantiosa, que precipitó la explotación de la operación.
Tras varios meses de investigación, se logró identificar a los principales integrantes de la red que fueron finalmente detenidos y privados de los beneficios del tráfico ilícito.
Así, coordinados con el Juzgado de Instrucción 2 de Mondoñedo, se concretó la primera detención, un vecino de Eibar (Guipuzcoa) de 41 años de edad, quien se dirigía a la Marina Lucense, con seis kilos de hachis perfectamente ocultos en la rueda de repuesto del turismo en el que viaja con tres de sus hijas menores, el fin de ocultar la naturaleza ilícita del viaje ante un posible control covid.
Para detectar y acceder al estupefaciente fue necesario un exhaustivo registro del vehículo, en el que participó el Servicio Cinológico de la Guardia Civil.
La persona detenida contaba con la colaboración de los presuntos destinatarios, las cales barrían la zona al objeto de detectar presencia policial en las entradas a las localidades de A Mariña, indicando los mejores días para acceder a la comunidad autónoma y descartando en los que se sucedieron controles en la autovía A-8.
En la fase de explotación se procedió a la detención de un vecino de Foz, de 36 años de edad, presunto destinatario para la distribución del estupefaciente intervenido y quien se encargaba de las contra-vigilancias policiales.
Tras estas detenciones se realizó un registro en la vivienda de este último en la que se encontró más sustancias de las mismas características aprehendidas en la actuación inicial y dinero presuntamente procedente del enriquecimiento ilícito.
En una segunda fase se procedió a la detención de dos vecinos de Foz, de 40 y de 42 años, y un vecino de Barreiros de 43 años. En el caso de estos dos últimos les fueron intervenidos cocaína y hachís, dispuestos para la venta, hallazgos tanto en el momento de su detención como en los dos registros llevados a cabo en las localidades de Foz y Barreiros.
Precisamente uno de los domicilios de Foz era compartido por estas dos personas como lugar de seguridad, hallándose en el trastero el lugar para la pesada, corte y distribución en dosis.
En la fase final de la operación se procedió a imputar en calidad de investigado a un vecino Lana Caridad (Asturias), de 33 años de edad, por participar presuntamente en un delito de coacciones, al compartir con los otros acusados un episodio para recuperar dinero procedente del tráfico de drogas y servicios de prostitución.
Tras ser puestos la disposición judicial se decretó el ingreso en prisión de cuatro de los investigados, dando por finalizada esta operación contra el tráfico de drogas en la Marina Lucense.
