Una empresaria del sector turístico de Vilaframil emprende una campaña reclamando el asfaltado de las pistas del rural y contenedores de reciclaje.
Carmen, una empresaria de la parroquia de Vilaframil, propietaria de varios dotaciones para el turismo rural, censura la negativa por parte del gobierno local para arreglar las pistas y poner unos colectores para el reciclaje de de vidrio y tarjeta.
“En los tiempos que vivimos tenemos que reactivar la economía y es difícil cuando no contamos con el apoyo del Ayuntamiento”, dice Carmen.
Esta empresaria cuenta con una casa de turismo rural en esta zona próxima a Rinlo, Casa Benito, además de otra vivienda turística. Ahora, ha previsto realizar una ampliación de su negocio con unas cabañas. Segundo explica, le solicitó al alcalde en diversas ocasiones “el arreglo de las pistas de la parroquia en beneficio de los vecinos de la Madanela que sufren a diario, como a mi, el mal estado en el que se encuentran y para mejorar la imagen de mi negocio que se ve muy afectado por este problema”.
También han solicitado la instalación de contenedores para el papel y el vidrio para que los usuarios de los apartamentos y los propios vecinos puedan reciclar. En cualquiera de los casos a respuesta del gobierno del BNG fue a misma: “excusas, pero ninguna solución”. Es más, “no vemos ninguna intención por parte del equipo de gobierno de apoyar a los negocios en el rural”.
Explica también que el alcalde no está apoyando las iniciativas en el rural “ya que incluso para dar una licencia de obras, tuvimos que esperar 15 meses y eso no es de recibo”.
Carmen, como otros negocios del rural, se quejan “de una mayor atención al centro en detrimento del rural pero es el alcalde de todos así que tiene que mirar por todos nosotros”.
Añade que se trata de más o menos 500 metros de asfaltado, que están en pésimo estado. “Ya le dije que sí no se podía aún, que por lo menos a rebachara, como se hace en otros lugares”.
Carmen invita al alcalde a solicitar las ayudas de la Xunta para el adecentamiento de caminos, “si el Ayuntamiento de Ribadeo no puede hacerse cargo, pero tenemos que seguir adelante con nuestros negocios”, recalca.
Su lucha está activa en las redes sociales pidiendo el apoyo de los vecinos para contar con mismos servicios y atención que en la zona urbana. “Ribadeo vive del turismo y del comercio por lo tanto debemos cuidar precisamente esos sectores”.
